La Administración de Parques Nacionales (APN) declaró al Volcán Lanín como «Sitio Natural Sagrado Mapuche», decisión que fue calificada como «un hecho histórico» por la Confederación Mapuche de Neuquén. Sin embargo, el gobernador neuquino Omar Gutiérrez salió a repudiar la iniciativa, adelantó que avanzará con decisiones administrativas y presentaciones legales para dar marcha atrás con la resolución y apuntó que el volcán es «de todos los neuquinos y las neuquinas».

La decisión tomada por el organismo dependiente del Ministerio de Ambiente fue comunicada a través de la resolución 438, que determina que debe crearse un mecanismo de trabajo conjunto con el Pueblo Mapuche para la elaboración de un Plan de Manejo del Sitio Natural Sagrado Volcán Lanín-Pijan Mawiza.

De acuerdo a la resolución ese plan de manejo conjunto deberían definirse junto al Pueblo Mapuche los criterios de uso y zonificación, las modalidades de manejo intercultural del sitio y la asignación de los recursos necesarios para el cumplimiento de la presente. 

La resolución indica que parte de la política de la APN es reconocer «los lugares sagrados como un valor de conservación para las comunidades y para el área protegida, y en especial al Volcán Lanín como uno de ellos» e indicó que la declaración como sitio natural sagrado respondió a un pedido de la Confederación Mapuche de Neuquén.

«Los valores del Pijañ Mawiza se relaciona con nuestra forma de vida, de quienes convivimos desde siempre con él y el ecosistema que alimenta; está unido a la identidad nacional mapuche y es necesario para importantes propósitos ceremoniales y religiosos», sostuvo la confederación tras conocer la decisió de la APN.

Además, la confederación mapuche valoró el reconocimiento del lugar sagrado como forma de protegerlo de «la conducta humana está teniendo efectos dramáticamente negativos sobre la diversidad de vidas del planeta y al mismo tiempo, las lenguas, sistemas de creencias, los valores tradicionales, la rica diversidad cultural».

El rechazo llegó por parte del gobernador de Neuquén, Omar Gutiérrez, quien calificó la decisión como «un atropello a las autonomías provinciales, un acto más de centralismo y una intromisión» y anticipó que iniciará «las acciones administrativas y legales correspondientes porque se trata de un acto ilegitimo e ilegal».

«El Lanín es un símbolo de la identidad neuquina y es de todos los neuquinos y neuquinas; forma parte de nuestra geografía e identidad cultural y está en nuestro escudo provincial, el himno provincial y nuestra bandera», resaltó el mandatario provincial apuntando contra el valor que tienen para el Pueblo Mapuche, preexistente a las provincias que conformaron el Estado argentino.